La estrella pop adolescente escapó a Jerusalén después de su concierto en Tel Aviv, se las arregló para visitar lugares sagrados con su familia y fuertes medidas de seguridad.
Después de varios días de esconderse de el público en su habitación del hotel de Tel Aviv, Justin Bieber dió un concierto en el Tel Aviv's Hayarkon Park la noche del jueves, y luego se escabulló desapercibido a Jerusalén.
Tras una visita a Yad Vashem, Bieber llegó al Muro de las Lamentaciones cerca de las 3 de la mañana del viernes con su madre y un grupo de casi 20 personas, en su mayoría guardaespaldas.
Bieber había expresado previamente su deseo de visitar los lugares sagrados. "Estoy en la tierra santa y estoy agradecido por ello. Sólo quiero tener la misma experiencia personal que los demás tienen aquí ", dijo en su cuenta de Twitter.
Sin embargo, tras días de acoso por los paparazzi, Bieber se retiró de la vista pública y sólo atinó a visitar Jerusalén bajo la oscuridad después de su tan esperado concierto.
Esto es lo que Justin comento en su Twitter:
"ayer por la noche después de el show fui capaz de ver Jerusalén...realmente fue una increíble experiencia. gracias a todos los que me ayudaron a hacer esto posible....pude ver el muro y los túneles e incluso un baño sagrado en el que Jesús pudo haberse bañado. increíble.también pude visitar el Yad Vashem Holocaust Museum. Un lugar increíble y fue algo que yo nunca olvidaré."
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